“Probablemente, algunas familias no quieran salir todavía de sus casas con los niños”, matiza la doctora María García-Onieva. Sin embargo, afirma que para los pequeños “poder ver el sol, tomar el aire, andar, aunque no sea grandes distancias, les hará recordar lo que en ellos es habitual: el movimiento al aire libre“. Les va a ayudar a empezar a ‘normalizar‘ su vida, y además, descubrir cosas que en el día a día no podían ver. “Los padres pueden conseguir que estas salidas sean didácticas, divertidas al ir a comprar el pan o a la farmacia”.
Una vez regreséis a casa, lo más importante es que os lavéis las manos, “y tendremos que recordarlo con ellos”.
A continuación, habrá que limpiar las suelas de los zapatos o las ruedas del carrito con lejía diluida, a pesar de que no exista una evidencia clara de que el coronavirus pueda estar en el suelo tanto tiempo. María García-Onieva también hace un llamamiento a la tranquilidad, puesto que “el contagio es difícil si los niños no han estado en contacto con otros adultos ajenos a la familia y no han tocado nada”.
En los siguientes videos tenemos la explicación de una forma más visual.
Ahora ya sabéis, a disfrutar de los paseos pero con responsabilidad y haciendo caso a los mayores.
Salidas infantiles a la calle
Salidas infantiles a la calle